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NUESTRA HUELLA

Desde el primer día sabíamos que Santa Bárbara iba a ser algo más que una marca de joyería. 
Todas las decisiones tomadas desde la producción hasta los complementos tienen un impacto ambiental y social.

Nuestra primera inquietud fue reducir nuestra huella de carbono y esto significaba centralizar la producción en un radio máximo de 100km. Conseguimos nuestro primer objetivo y además acotamos la fabricación de las joyas a 10km entre todos nuestros proveedores y artesanos. 

Además, nuestro proceso de fabricación es 100% artesanal, lo que significa que cada pieza es única, hecha a mano por artesanos especializados con métodos de joyería tradicional. 

En el proceso de fabricación, todos los residuos y sobrantes de los materiales que utilizamos se vuelven a fundir, esto produce 0% desperdicio y contaminación permitiendo su segunda vida. 

Con este triple impacto logramos tener un producto local en su integridad reduciendo el CO2 con salarios justos, generando 0% de contaminación a través de la reutilización de excedentes en el taller.

Nuestro packaging LOCAL y ECO, es una caja de metal de hojalata biodegradable con certificados ISO 9001:2015. Esto significa que tenemos una producción excelente de packaging, ya que esta norma confirma que se minimiza el número de errores de producción ya que corrobora que tenemos unos procedimientos de trabajo mejor definidos.

También contamos con el certificado Sedex SMETA 4 Pillars que confirma que consideramos y obedecemos los principios de producción ética y socialmente sostenible. Lo que quiere decir que apoyamos la Libertad de Asociación, la Seguridad y la Higiene, condenamos el trabajo infantil, entre otros temas relacionados con la responsabilidad ética laboral.

Lo mejor de nuestro packaging es que seguramente no termine en la basura ¿Recuerdas la caja de galletas de tu abuela que era un costurero? Bueno tu caja Santa Bárbara está hecha para que le des una segunda vida.

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